Alianza de civilizaciones. Jacques Loussier

A orillas del Loira está situada la ciudad de Angers, patrimonio de la UNESCO y lugar de nacimiento del pianista Jacques Loussier. Este angevino de setentaytantos años, al que algunos consideran el mejor pianista del mundo en su género, es más que famoso por sus interpretaciones jazzísticas de grandes maestros de nuestra Música Clásica, especialmente de las obras del gran J.S. Bach.

La técnica pianística de este hombre dicen los entendidos que es la pera y como ha demostrado, sus inquietudes musicales parecen no caber en el encorsetado mundo de la Música Clásica, que tiene todo lo que hay que tener para alimentarnos el espíritu menos una cosa: la improvisación.

Ya decía el gran Leonard Bernstein que la denominación de "Música Clásica" no le gustaba demasiado porque, en su opinión, una de las principales características diferenciadoras de esta música es que el intérprete debe ser lo más fiel posible a lo que el compositor ha escrito, de ahí que a Bernstein le gustara más el término de "Música Exacta".

Aunque si queremos ser del todo justos con los Clásicos, tenemos que recordar que la improvisación durante la época Barroca fue casi asignatura obligada para los ejecutantes, sólo que entonces le llamaban "el arte de la variación".

Pero en fin, que tuvo que llegar el jazz a principios del s. XX para volver a revitalizar este recurso que a los grandes intérpretes tanto les atrae.

Nosotros estamos muy contentos de que Monsieur Loussier llegara al punto de que su sobrado virtuosismo en el piano le empujara a ir un poquito más allá de ser un excelente intérprete y se metiera por los atractivos senderos de la música jazz sin poder despegarse del todo de sus/nuestros amados compositores clásicos, porque el resultado es otra maravila ejemplo de lo bonitas que pueden ser las Alianzas de Civilizaciones.

A Loussier, como buen músico de jazz que es, las melodías de Bach, Beethoven, Debussy, Ravel o Satie le sirven como pretexto para meter sus síncopas y variaciones apoyado en la típica estructura de formación de jazz: solista más base rítmica de bajo y batería.

Pero como siempre, queridos amigos audiovisuales, esto se entiende mucho mejor con un ejemplo.