lunes, 20 de septiembre de 2010

Ordet vista por un ateo. ¿Por qué no me gusta el Ordet de Dreyer?.

Porque soy materialista y ateo.

Aseguren sus cinturones que hoy vamos a hablar de Ordet (1955), de Carl T. Dreyer, pero antes vamos a meternos en ambiente.


A Juana de Arco la quemaron viva por chalada y por rencillas de frailes y reyes, pero a Giordano Bruno lo quemaron por ateo, por racional y por científico, y a mí me da más pena lo de Bruno. No puedo evitarlo.
Pero, ¿es que no puede un ateo materialista disfrutar de Ordet al igual que disfruta de una catedral cristiana o de una Misa de Schubert?. Pues un ateo materialista standard no sé, pero yo no, porque el final de Ordet me revuelve las tripas y su historia siempre me pareció una de las más perversas de la Historia del Cine hasta que vi Rompiendo las Olas, que es una especie de remake de Ordet pero en plan moderno, con fellatios y campanas incluídas y le quitó el n.1 de mi ránking personal.

Ordet es un torrente de espiritualidad... Pero eso ¿qué es?, ¿"un torrente de espiritualidad"?, pero ¿qué significa esa frase?. Con sentencias como ésta suelen defenderse las virtudes del significado de Ordet. Yo no las entiendo.
Y es que la fe en los hombres mueve montañas, las mueve literalmente con ayuda de maquinaria pesada, y por en medio de esas montañas pasan los trenes para que podamos visitar Segovia. Es entonces cuando creemos en el Hombre: al olor del cochinillo.
Pero la fe en Dios necesita resucitar muertos, que es una cosa pavorosa que delata el miedo a la muerte y el poco convencimiento que, en realidad, tienen la mayoría de los occidentales de que exista vida Más Allá. O, al menos, un Más Allá mejor que el Más Acá que tampoco está tan mal, con sus vacaciones pagadas, sus chiringuitos en la playa y su inabarbacable oferta de ocio.

Veamos lo que nos cuenta Ordet, una película de cámara (en el sentido orquestal) basada en la obra de teatro de 1925 que el dramaturgo y pastor luterano Kaj Munk escribió en 6 días.
A partir de aquí spoilers.

"Me llamo Jesús de Nazareth", "Lo que tú digas chiflado".

Ordet es la historia del enfrentamiento de dos familias danesas cuyas disputas religiosas quedarán zanjadas por un hecho sobrenatural. En la familia protagonista hay un patriarca que tiene tres hijos: El primer hijo, Johannes, se ha chiflado tras estudiar teología porque iba para cura y dice que es Jesucristo. El segundo hijo, Mikkel, no tiene fe, tiene una mujer muy guapa, dos hijos y otro en camino. Y el tercer hijo, Anders, se quiere casar con la hija del patriarca de la familia rival, un luterano ortodoxo.
Con estas 5 maneras de entender la fe, (el creyente standard o "cristiano luminoso" que decía Bazin, el místico, el agnóstico, el atrapado entre dos fes, y el creyente ultraortodoxo), más el pastor y el médico del pueblo, (representantes oficiales de la Religión y la Ciencia), Dreyer hace sus malabarismos metafísico - religiosos que tienen pinta, a lo largo de la película, de que no van a llegar a ninguna parte, como toda disquisición teológica. A este pastel se le añaden dos guindas: los personajes femeninos, (la esposa y la hija de Mikkel), que por su inocencia representan la fe pura que resulta que solamente tienen los simples y los chalados. Pura imaginería cristiana.

Bueno, la verborra metafísica no nos lleva a ninguna parte, como ya digo, y las diferentes posturas ante la fe y la religión parecen ser irreconciliables, (es que lo son por definición). Entonces, ¿qué hacemos para zanjar el asunto?, pues lo único posible, que baje Dios y lo vea, o sea, un milagro. Pero un milagro de los buenos. Vamos a resucitar a un muerto, una de las pocas cosas que, hasta el momento, no ha conseguido la Ciencia. ¿A quién matamos?, pues al que menos fe tenga, a Mikkel.., espera un momento.., ¡somos cristianos y luteranos!, que se note.., ¡vamos a matar a la mujer del ateo después de que dé a luz a un bebé muerto!. Y luego la madre va a resucitar, durante su velatorio, delante de todos, para que alucinen y se inclinen ante el poder de la auténtica fe, la del chiflado Johannes, autor del milagro, lo mismo que flipó el Faraón ése que no se creyó que Jehová los tenía cuadrados hasta que le mataron al hijo.

Pero, ¿por qué debería Johannes devolver la vida a la pobrecita Inger si ni su marido, ni su familia, ni sus vecinos tienen verdadera fe y, además, ella está mejor en el Cielo?, pues porque se lo pide su sobrinita, que es una niña pura como el agua de manantial, en su pureza radica su fe (¿cualo?), y prefiere a su madre viva que muerta, (el diálogo entre Johannes y su sobrina a este respecto es de traca).

Dios 1 - Ciencia 0. Johannes le restriega el milagro al médico que acaba de certificar la defunción de una señora que se está levantando del ataúd a consolar a su esposo viudo.

Coda. Remate final. Melodrama y tragedia. Mostremos la comprensible alegría del no creyente cuando, gracias a la fe de su hermano y de su hijita, vuelve a abrazar la carne caliente de su esposa recién muerta. Qué calentita y qué guapa es mi mujer cuando está viva. Ya no dormiré solo en las frías noches danesas. Con lo fácil que era. Bastaba con tener fe verdadera.
Y ¡bingo!, con esto se salvan los trastos al incluír no solamente entelequias y supersticiones, sino también una dosis de eso del Amor y de la Carne a la que no hay que despreciar y que son indisolubles del alma, porque somos cristianos modernos, (hermosa contradicción), no como los de la Baja Edad Media.
"Pero es que... también amé su cuerpo...", dice Mikkel cuando le consuelan con el argumento de que el espíritu de su amada está en el Paraíso. Reconozcamos que esta hermosa frase libra a Munk y a Dreyer de caer en el ridículo total del fundamentalismo religioso.

Esta es la historia de Ordet, de La Palabra que es la traducción en nuestro idioma. Moraleja: Sólo es fe verdadera la fe del Hombre que cree en los milagros. La fe que los tiene bien puestos y que sopla las trompetas para derribar las murallas de Jericó. La otra, la de la mayoría de los creyentes, no sirve para nada. Es un compendio de convencionalismos para cobardicas.

¿Qué os parece?. ¿Sabéis que es lo peor de todo?. Lo peor de todo es que ¡Carl Theodor Dreyer tiene razón!, o se cree o no se cree. El resto son mandangas. Y si crees en un Dios Todopoderoso a la fuerza tienes que creer en los milagros.

El argumento de Ordet es bochornoso y no apto para una mente racional. La versión de Dreyer es un panfleto, pura apología cristiana. No es leyenda, no es folclore, no tiene elcomponente naíf de la mitología.
Una vez leí que Dreyer filmó dos finales: uno fiel al de la obra teatral en el que se cuestiona la autenticidad del milagro y el otro, el que finalmente montó, que no deja duda alguna sobre lo milagroso de lo que estamos viendo. Esto es lo que odio de Ordet, esa obscena intencionalidad evangelizadora es lo que hace que siempre recuerde esta película con enorme desagrado. Lo mismo que supongo que hará que los creyentes la veneren.

Ordet es la intelectualización de la fe que hace la mente racional de un creyente, atrapado entre dos mundos, que cree estar combatiendo la superchería de la ortodoxia luterana y católica pero que no hace sino alimentarla con sus milagrerías. Pero intelectualizar la fe es como cuadrar el círculo; una pérdida de tiempo. Ordet no me sirve ni como cuento. Es una milonga que pretende resolver las dudas y los temores que surgen de la lucha entre la razón versus la fe y sus diferentes interpretaciones, con un milagro en el siglo XX, un truco de feria que resucita a un muerto a petición de una niña.

Johannes es la avanzadilla de Jesucristo Súperstar, el hijo enrollao de Dios al que no le mola el encorsetamiento de las normas de la Iglesia. Y así ponemos el contador a cero y otros dos mil años a vivir en el cuento. La culpa de todo lo malo que pasa no es del dios que puede resucitar muertos, es de los Hombres, que somos muy malos y no tenemos fe y cada día nos hacemos más preguntas sobre los átomos y los neutrones.

Ordet quiere convencernos de que hay un Más Allá al estilo de Santo Tomás: metiéndole mano a una mujer que primero está fría, en su ataúd, y luego caliente, vivita y coleando. Dreyer quiere que entendamos que para llegar a Dios no necesitamos necesariamente pasar por la ortodoxia de la Iglesia, nos basta con la Biblia y mucho tiempo libre. Algunos defienden que es un canto a la libertad individual. Y nos lo tenemos que tragar. Ordet tiene la misma moraleja que Forrest Gump: los simples heredarán el Cielo.

Ordet es una película que formalmente es bonita si te gusta la música de cámara y un poco menos bonita si lo tuyo es la gran orquesta sinfónica porque tiene poco más de 100 planos. Es una película que posee una belleza muy particular que algunos encuentran atractiva y otros excesivamene teatral, demasiado parsimoniosa y hierática. Pero Ordet posee, para un ateo, un alma retorcida, tramposa y viciada. Es un talibán vestido de hippie. Es como un Testigo de Jehová sonriente e impecablemente vestido: doblemente peligroso. Eso sí, quiero proclamar que la oligofrénica interpretación de Preben Lerdorff Rye (Johannes), la encuentro exasperante (especialmente en la v.o.).

Yo también admiro a Dreyer, a veces, por cómo manejaba la cámara pero me pone enfermo cuando nos evangeliza con historias anticatólicas como la de Ordet, una película militante de la Reforma, sólo apta para cristianos y/o estetas.
Pero no le perdono que en 1955 rodara Ordet, lo mismo que no le perdonó Nietzsche a Wagner sus delirios mitológicos y rompió la amistad con el músico al que admiraba y amaba profundamente.

La Reforma quiso enseñar a la Iglesia de Roma cómo había que amar correctamente al Cristo, lo mismo que Ordet. Pero a mí me importa un comino el Cristo y no me interesa cómo hacerle el kamasutra correctamente. Me interesa como hacérselo a mi mujer.
Hay otras cosas que me asquean bastante de Ordet, pero creo que el post ya me ha quedado bastante largo.

Epílogo. Al final de El Manatial de la Doncella, (esta sí, una obra maestra de Bergman), nace una fuente, brota un torrente, debajo de la niña muerta, pero un torrente de agua que nadie ha pedido en sus rezos. Brota una leyenda creada por hombres que cantaron a una niña asesinada y violada que sabían que no se levantaría jamás de su tumba y le pusieron su nombre a una fuente de agua fresca. Es otra milonga, pero al papá de la niña muerta siempre le consoló pasear junto a esa fuente que llevaba el nombre de su hijita muerta y que, a lo mejor, fue lo que evitó que se volviera loco como Johannes, el barbilampiño que leía a Kirkegaard y que nos la quiso colar con un milagro de sanador filipino.

I´m finished.

46 comentarios:

Luis Cifer dijo...

totalmente de acuerdo, yo tampoco soporto Ordet. Ese tufo evangelizador es exasperante hasta decir basta. Incluso muchos cristianos convencidos la encuentran insoportable y aburrida.

David dijo...

Ja,ja,ja...

Como ahora mismo no tengo vacaciones pagadas, pues igual ver cosas que dicen que lo del Más Allá no está tan mal, me hace gracia. Como esta reseña, que me ha encantado...pero...

Lo de Forrest Gump es más bien que los simples heredarán la tierra. Son los otros los que heredan el Sid, el Cielo!
Y de hecho, es así. La pena es que no lo hacen los simples de corazón como Forrest, sino simples hijos de puta.

Y El manantial de la doncella me encantó. Jo! El momento en el que el señor de la cas termina con los asesinos de su hija (incluyendo al niño!!) Tremendo. Bergman dijo que quería hacer una a la Kurosawa. Pues no sé. Pero peliculón.
Por lo demás... será que soy un ateo materialista standard.

Un saludito.

miquel zueras dijo...

También a mí me gusta mucho "El manantial de la doncella". En el desaparecido cine Spring en Barcelona vi una sesión doble con el film de Bergman seguido de un malicioso guiño: "La última casa a la izquierda", versión gore y de culto de la película sueca. Borgo.

MrMierdas dijo...

Vaya peso que me he quitado de encima...Ordet es una puta mierda infumable para mojigatos y beatos.No he pasado nunca del minuto 30 y algo, para mí es como un orfidal de 100 mgs y encima con comentarios de Garci pues te pegas una semana durmiendo.De Dreyer, ni comento...
David, el momento del manantial de la doncella va a MM ahora mismo...si señor!!! peliculón, peliculón...que bueno el ajuste de cuentas!!!

Crowley dijo...

Jo, Mr. Lombreeze no sabía yo que le había "molestado" tanto mi post sobre Juana, jejeeje. Es broma.

Yo soy ateo, pero Ordet me encanta. No por su mensaje, que ya se lo dije el otro día en respuesta a su comentario, sino por la belleza formal de Ordet, que es indiscutible y de una innovación del lenguaje cinematográfico que luego serviría como precedente.
Y sí, trata de la religión (pero no hay apología de ningún tipo) como cuestionamiento personal, pero también de un portentoso estudio sobre el ser humano.
Todo parece encajar a la perfección en lo que Dreyer nos cuenta (música, encuadres, escenarios, actuaciones).
Es denso, sí (pero no pesado), es metafísico, sí (pero mis creencias o falta de ellas en este caso, no se ven cuestionadas por lo que veo), pero perfecta en cuanto a resultado.
Me gusta Ordet por cómo cuenta lo que cuenta, no por el supuesto mensaje que se presupone debe transmitir.

Si Juana, a la que menciona al principio dle post, hubiese nacido hoy, ni hubiese sido juzgada ni condenada por sus visiones imposibles ni nada por el estilo, sino que habría sido explotada por la Iglesia para sacar el dinero de muchas personas.
Es interesante que mencione "Rompiendo las olas" porque el mismo Trier dijo que se inspiró en Ordet para ese realismo que tiene el film (que es el único de Trier que me gusta).

Al menos sí coincidimos en la de Bergman, que es otra genialidad.

Saludos

Sgt.Crap dijo...

Estoy de acuerdo en que Dreyer consiguió con esta película un hito en la historia del cine: llevó el tedio a límites deconocidos hasta entonces.

El lobby cristiano tienee peso a la hora de elaborar las listas de las mejores películas de todos los tiempos.
A mí me parece una basura en el fondo y en la forma.

David dijo...

Sgt. Crap (que veo que estás en el blog del hermano de Mr. Lombreeze, así que bueno, no sé si igual eres su primo, vecino, o vete a saber..).
Modera tu lenguaje, hijo. Porque,
¿hablas en serio, no?
Basura en el fondo y en la forma.

Mira, yo no llamo basura (al menos en público) a un montón de obras que realmente ni me interesan, y me parecen bastante aburridas...

Supongo que porque sé que hay una labor detrás de cualquier peli (igual meramente profesional, chapucera o sin ganas, eso es otra historia)...pero no sé. Decir que te parece una basura en el fondo y en la forma. Hasta Mr. Lombreeze reconoce que formalmente tiene su aquel.
Bastaba con lo del tedio y que no te gustó. Lo otro sólo demuestra otras cosas en las que no voy a entrar.
Un saludito.

David dijo...

Ey... Empiezo a sonar como el gallo Claudio (ja,ja).
Ya decía yo, ¿de qué me suena eso de "Modera tu lenguaje, hijo"? Del gallo Claudio (ja,ja,ja).
Joder! Qué estragos hizo la televisión en mi mente.

David dijo...

Y ahora veo que el comentario de tu hermano es muchísimo peor (ja,ja,ja).
Mr. Lombreeze. Creo que eres el mayor.. Pon orden, anda (ja,ja).

David dijo...

Y Mr.Mierdas y Sgt.Crap, espero que no os molesten mis comentarios, ni os los tomeis en plan ofensivo. Supongo que es vuestro estilo y forma de expresaros, pero de verdad que a veces os pasáis la hostia con esas salidas. En fin.. un saludo a todos.

Sgt.Crap dijo...

David, eso, vete a saber y me cuentas lo que averiguas.

lombriz ha dado su opinión, tú has dado tu opinión y yo también he dado mi opinión en la que me reafirmo. Ni es pose, ni estoy a la contra de nada pero tampoco me abruman los intelectuales y sus películas favoritas.

Me alegro de que os guste Ordet por dentro o por fuera o por en medio.
A mí no me gusta lo que dice porque estoy de acuerdo con lo que aquí se ha contado.
Tampoco me gusta cómo lo dice porque es lento, muy lento, muy, muy lento, muy, muy, muy lento y me parece una tomadura de pelo. La escena que ha enlazado la lombriz lo demuestra.

Gracias por tu aclaración, yo pensaba que las películas las traían las cigüeñas. Ahora estimo mucho más Transformers y los campos de exterminio nazis.

por cierto sí que me han molestado tus comentarios.

David dijo...

Vaya, pues ya lo siento. Pido disculpas... Ya me he dado cuenta de que sonaba, no sé... tal vez demasiado prepotente o algo parecido.
La peli no me parece tan lenta. Joder! Es otro ritmo. Las pelis mudas también son lentas en comparación con lo que se hace ahora y no por eso son malas.

Algunas pelis sí las traen las cigueñas, pero esta fue un milagro divino.

Y bueno, en serio. Perdón por el comentario, pero es que llamar basura a esta peli, que a mí me parece un peliculón. En fin... No iba con mala intención el primer comentario. Y el resto ya tenían un punto de coña que igual no se pilla.
Un saludo.
PD: Si no me lo dice Mr. Lombreeze, dudo que lo averigüe (ja,ja)

Pepe Cahiers dijo...

Menudo lío ha organizado usted, Mr. Lombreeze. Creo que debemos diferenciar dos cosas distintas. La película como ejercicio narrativo, cuyos meritos son más que evidentes, aunque el ritmo sea tan tedioso como el existencialismo de Kierkegaard y, por otra parte, las intenciones de una trama más que tramposa, pero muy fiel a la tradición, no solo del cine europeo, de presentarnos a un personaje ateo que al final redime su alma ante la evidencia de la existencia de Dios. Con esta repugnante carga hemos tenido que lidiar siempre y, al final, huímos de cualquier afan evangelizador, por muy buen envuelto que este en un ejercicio de estilo magistral.

Crowley dijo...

David, es que, como hemos comentado muchas veces, la ironía no se aprecia en los comentarios, que son fríos y poco reveladores, pero yo sí que había pillado esa ironía que te caracteriza, jejeje.
Y sí, parecías el Gallo Clauido... "oye, digo... oye", jejejeje.
En cuanto a lo de calificarla como mierda... hombre, te puede gustar más, menos o no gustar nada en absoluto, pero que a uno no le guste una cosa no significa que sea una mierda, digo yo, que gustos hay infinitos (por suerte para la pluralidad).
En fin. Saludos.

Mister Lombreeze dijo...

Pues sí Crowley, me llegó la inspiración de este post tras leer tu Pasión de Juana de Arco. Como puedes comprobar, su belleza formal también es discutible. Yo no percibo la película como tú, evidentemente. Tampoco creo que sea densa, de hecho es bastante simple. Los paralelismos entre la película de Trier y la de Dreyer son evidentísimos.

Tampoco creo que su estética puedan ser considerada como canónicamente hermosa. Entiendo perfectamente que es una propuesta extrema, lo mismo que el cine de Angelopoulos, Oliveira o Bela Tarr, y no tiene por qué gustar a todo el mundo, lo mismo que p.e. el arte abstracto.
En el otro extremo está Michal Mann, cuyas películas contienen entre 3.000 y 4.000 planos.

Ferre dijo...

Yo daré mi opinión de lo poco que he visto de "Ordet" (puede que superara la marca de Mr. Mierdas por 10 ó 15 minutos, pero si lo llego a saber, la dejo también en el minuto 30).

No me meteré en la parte teológico-filosófico porque me es indiferente a la hora de que me guste o no una película (dicho esto no estrictamente), aunque el tema pueda hacer que un film me interesa más o menos para verlo. En todo caso, eso no quiere decir que me guste que me sermoneen, ya sea la iglesia, una ONG o la Asociación de Vecinos de mi barrio. En el caso de Dreyer, sermonea a base de bien y por ahí no paso.

Como película me parece horriblemente lenta, tediosa, aburrida y soporífera. De lo que se deduce que para mí sus méritos no son nada evidentes. O yo no se los supe ver, aunque tampoco he visto tan poco cine para no ver por lo menos 2 ó 3 que me permitan salvarla. Y es que soy de la cuerda del Sr. Hitchcock, que mantenía que si una película no es entretenida (en el sentido amplio del término), podemos olvidarnos de ella.

En definitiva, yo de Dreyer huyo. Intenté "Ordet" y fracasé. Completé "Vampyr" y me distrajo una escena y media. COn dos me es suficiente.

Saludos,

Ferre

PD: Coincido: "Rompiendo las olas" es insoportable. Absolutamente insoportable. Lo único que me interesa de ella es la música de Jethro Tull que suena de vez en cuando. Pero ni eso evitó que en el descanso me marchara de la sala.

Mister Lombreeze dijo...

Bueno Luis Cifer, me siento más bloggeramente arropado con tu opinión.

Exacto PEPE, yo huyo de esta película como huyo de El Triunfo de la Voluntad.
Pero para ver ejercicios narrativos sin contenido atractivo para mí, y planos secuencia larguísimos, me veo La Soga y además paso un buen rato.

Crowley dijo...

Mr. Lombreeze,
uyuyuyuy, a mi Angelopoulus me aburre muchísimo, mucho. No me gusta nada su cine (salvo escenas y momentos puntuales). Con Tarr depende, pero Oliveira me gusta.
Saludos

Mister Lombreeze dijo...

En cuanto a la polémica surgida entre David, MrMierdas y el Sgt.Crap, quiero solamente opinar que entiendo que cuando alguien califica una película de "puta mierda" o "basura" dice simplemente que no le gusta nada de una manera coloquial que personalmente tampoco encuentro tan dura como le ha parecido a David y que, por supuesto, respeto absolutamente.

Creo que todos conocemos muchos ejemplos de grandes películas odiadas por grandes directores.

Aquí se puede opinar lo que se quiera de las películas en los términos que se quiera. Allá cada cual con su estilo, que yo estoy curado de espantos.

Intervendré solamente si se pasa al ataque personal gratuito y grosero.

MrMierdas dijo...

Ferre 10/10, gran comentario para gran entrada!!!

B R A V O!!! y encima sin censuras, sin faltar y sin tufillo cultureta-judeo cristiano-irónico festivo.

10/10!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

PD:Tengo el "defecto" de decir a lo que no me gusta que es una mierda.Este derecho lo invento Rinkley, pero ahora los culturetas dicen que hay que respetar y que si los gustos y que si tralari, tralara...anda a tomar pol culo!!!

Mister Lombreeze dijo...

Ferré, y Bela Tarr?, qué tal?, je je...

Bueno, pues ya no estamos tan solos los del grupo "no nos gusta Ordet".

Rompiendo las olas es, todavía, más vomitiva que Ordet. Y más ridícula.

Mister Lombreeze dijo...

Ferré, qué tal el Sanctus de la Misa de Schubert?.

David dijo...

A ver, yo no me voy a dar por aludido con lo de los culturetas, que ya veis que sigo este blog...pero lo de anda a tomar pol culo puede entrar dentro de lo personal (lo de gratuito y grosero no digamos)(ja,ja)...

Y vale, igual soy un poco "carca" y me he pasado. Está claro que es un rollo coloquial. Ya lo voy a emplear yo, Mr.Lombreeze. Ya lo voy a emplear (ja,ja).
Y bueno, ya he pedido disculpas, ¿no? ¿Qué más queréis? ¿Qué basura de las que os gustan tengo que afrontar como penitencia? Esto está dicho en tono de coña, como comprenderéis.
Un saludo a todos.

MrMierdas dijo...

David, YO, aguanto tu basura todos los días, ya has pagado tu penitencia tranquilo.Mucho, ja,ja y mucho ji, ji, pero tiras a dar y sabes que yo en eso,soy un puto "sniper" así que ya sabes...vuelvo a repetir que ese tufillo que estás dando no mola nada!

Redrum dijo...

Jajajajaja!!! Las grandes películas crean grandes polémicas!!!

Bueno, no es plan de discutir los gustos de nadie, ya que "lenta, aburrida, tediosa, etc." son apreciaciones personales. Hay gente que llega al orgasmo escuchando a Björk...

Molesta el tema de la etiquetas, tanto para tildar de ignorante como de cultureta, pero vamos, nada que no se arregle con un...

http://www.youtube.com/watch?v=nMqnl6ntfWE

Enhorabuena por la entrada, y espero que no le tenga en cuenta el mensaje a la música de Bach!

1 saludo!

Ferre dijo...

Tarr. No, por Dios, con una de él también me ha llegado. Puede que cuando sea anciano y esté recluido en el asilo tenga tanto tiempo que intente alguna película más de él, pero hasta ese momento, lo dudo.

Del "Sanctus" de Schubert opino que la Iglesia puso otro clavo en su ataúd el día que sustituyó estás magníficas obras por grupos de jovencitos beatos tocando acordes de tónica y dominante en sus guitarras. Hasta un ateo como yo iría a contento a misa de vez en cuando para poder disfrutar del espectáculo de este Sanctus, oiga.

Saludos a todos,

Ferre

PD: Mr. Lombreeze, un pequeño detalle: hágame usted el favor de quitarme esa tilde de la 2ª "e" :-)

dvd dijo...

Maravillosa obra maestra absoluta; incontestable... una obra de arte, como Miguel Angel, que al final resulta que también pintaba para ateos... El arte es arte y la religión es otra cosa; el arte suscita preguntas, la religión pretende contestarlas...

Lucifer, Becario del Mal dijo...

Eh tios, no os metais con Rompiendo las Olas o empiezo a repartir ostias como panes, tanto que hasta Ordet os parecerá gloria bendita.

MonSeñor Gusano dijo...

Pues he de decir....que no he visto esta peli. Ni ganas que tengo. jajajaja discrepar hijos, discrepar y debatir.

Jeremy Fox dijo...

¡Ah, cómo me gustan las polémicas! No me queda más remedio que pronunciarme, porque no hacerlo va contra mis principios.

Escribo por puntos porque así ordeno mis pensamientos (dentro de lo ordenados que pueden estar los pensamientos de un demente como yo):

1.- No creo en Dios y soy de izquierdas. Pese a ello, "La pasión de Cristo" me parece una obra maestra como la copa de un pino y soy capaz de disfrutar de "Ordet" o de "El triunfo de la voluntad" por igual. No creo que sean incompatibles. Desde luego, para mí no lo son.

2.- Pese al punto anterior, entiendo perfectamente que alguien pueda aburrirse como una ostra viendo "Ordet". Si a priori alguien me hubiese contado el tipo de película que era, es posible que ni me hubiese atrevido a verla porque se aleja bastante del tipo de cine por el que siento más interés (ni he visto nada de Angelopoulos ni de Tarr, ni tengo especiales ganas salvo por fastidiar a Ferre, jeje).

3.- Pese al punto 2 (como veis soy un ser lleno de contradicciones) y a que, efectivamente, "Ordet" avanza lenta como un riachuelo en la llanura (la metáfora poética busca suscitar vuestra simpatía por mi mensaje y demuestra que soy un manipulador), "Ordet" consigue emocionarme como pocas películas en su media hora final.

4.- Quizás todo esto se deba a que no suelo considerar que las películas me están intentando vender un mensaje por el sencillo motivo de que soy un comprador muy difícil de convencer. Me da igual lo que cuente Dreyer porque una película no me va a hacer creer en nada. Yo lo veo como una historia sobre gente que sí cree y ellos son los importantes mientras veo la película; yo soy solo el espectador y como tal disfruto de la forma que tienen de contármela.

5.- Tras todo este buen rollo que os he soltado no me queda más remedio que añadir algo de veneno a mi mensaje dejando en el aire algunas preguntas: ¿No hay machismo en la mayoría de westerns que tanto adoramos? ¿No hay muchas grandes películas en las que el mensaje parece ser que no hay nada como una buena pistola para solucionar los problemas? ¿Debería asquearnos la música sacra por culpa de su descaradísimo mensaje?

Da gusto debatir con vosotros, queridos amigos. Un abrazo de vuestro humilde servidor.

Jeremy

lunes dijo...

Ya he confesado alguna vez que soy un cateto orgullosísimo en cuestiones de cine (y en muchísimas más), y una de las razones (muchas)que me hacen interesarme aún más por este arte es comprobar lo que dan de sí para debatir películas como ésta.
En mi ignoracia yo las pelis las califico en dos : me entretienen/interesan o no. Mi intuición dice que ésta sería de las de no. Por otra parte, el Sanctus éste es un poco raro para Sanctus y no sé explicarme mejor.Me gusta.

Mister Lombreeze dijo...

@Lucifer, yo ya me he metido con Rompiendo las Olas, en el comienzo del post más concretamente. Pero los robotos como tú no me dais miedo porque, en el fondo, sois unos blandos y tenéis sentimientos. Esto lo aprendí viendo Blade Runner.

@dvd, bueno, lo de incontestable acabamos de demostrar que no es, je, je, como todo el Arte y como ya sabemos todos de sobra, pero adoro la vehemencia de esas afirmaciones absolutas, lo reconozco.
El arte es una cosa, la religión otra, el motociclismo otra y los panfletos otra. Y en El Nacimiento de Una Nación a todos nos da un poco de asquito lo del KKK por mucho que nos esforcemos en liberarmos de las cadenas del relativismo histórico.
Y a mí Ordet, me asquea casi todo el rato.

Mister Lombreeze dijo...

@Jeremy Fox,
1.- Me encanta La Pasión de Cristo. Es un peliculón... que cuenta una leyenda. Es una historia como la de El Señor de los Anillos.
3.- A ti te emociona y a mí me da vergüenza ajena. Toma, claro que emociona, resucita a una muerta que se abraza con su marido que la consuela porque su hijo nacido muerto está en el cielo... Creo que había un culebrón que acababa igual... Claro, le pones el final de Ordet a cualquiera y se echa a llorar.
4.- Yo también creo que soy difícil de convencer, pero al juzgar la intencionalidad del artista llego a conclusiones, p.e. que Ordet es un panfleto bochornoso porque está rodada en 1955 y no en 1582.

5.- Contesto a tus ponzoñosas preguntas de contrabandista sin escrúpulos.
- Sí, en algunos westerns (y otros géneros) hay machismo y me gustan menos y me rechinan más que en esos otros en los que no hay. Me gusta más ver a Grace Kelly ayudar a su marido en Solo Ante el Peligro que ver a Jason Robards palmear el culo de Claudia Cardinale en Hasta que llegó su hora.
- Mmmm, tampoco tantas creo yo. Hay más grandes películas en las que la solución es la pistola cuando falla todo lo demás: La Ley, La Justicia, La Policía, El Estado, etc. Es un matiz importante. Shane tiene que balear a los malos para que no maten a los granjeros indefensos.
- La música compuesta hace siglos pues no, porque volvemos a lo del relativismo histórico que es una falacia peligrosa.
Si en 2010 un compositor compusiera un oratorio con una letra genérica "alabad al Señor Misericordioso blablalalba" pues tampoco nos rechinaría demasiado porque sonaría a generalidades esprituales más ambiguas que Falete. Pero si por el contrario el texto dijera "Arrepentíos pecadores porque os vais a condenar y los sodomitas irán al infierno y vendrá el Señor a matar a los primogénitos de los ateos...", seguramente nos daría muchísimo repelús. El mismo que me da la moraleja de Ordet: el verdadero creyente tiene que creer en milagros. Roza el fundamentalismo.

Bueno, seré un moñas, pero no soporto ver El Triunfo de la Voluntad. No consigo aislar sus cualidades artísticas de su perversa propaganda.
Ordet es más que la historia de una serie de creyentes y su forma de vivir su fe. Eso sería con otro final. Pero con el final que propone Dreyer se da carpetazo al asunto al demostrar empíricamente (toma contradicción) que la fe verdadera es la de Johannes, (el nuevo profeta Elías), y debate sobre la fe zanjado.

Mister Lombreeze dijo...

@lunes, amigo, sin duda te has quedado con lo mejor de la entrada: la música de Schubert. Puedes hacer click en el link del final de la peli y te haces una idea.

Mister Lombreeze dijo...

jajaja, redrum, muy bueno macho.
pero tú has visto la peli?, qué opinas?.

Jeremy Fox dijo...

Mr. Lombreeze admita ya que los católicos le caen peor que los machistas y los pistoleros!!! ;)

La verdad es que vi la película hará unos 15 años y ya digo que a mí me emocionó aunque entiendo tus razonamientos y no puedo rebatirlos.

Eso sí, no me lo compare con un culebrón porque éstos a mí no me emocionan porque lo que emociona es cómo se cuenta no lo que se cuenta.

Saludos.

Ferre dijo...

Jeremy Fox, tus palabras resbalan sobre mi espíritu altamente entrenado en filosofía zen. Pero como tengo mis momentos de debilidad metafísica, me lo guardo para dentro de unas semanas.

Opino como tú, que el tema de una película no debe ser un elemento de juicio para su valoración como film. También entiendo que inconscientemente esto es imposible, pero debemos hacer un esfuerzo consciente para evitar que su efecto no sea fundamental en nuestro razonamiento.

Si bien opino que el tema no es parte esencial de la obra artística, sí que lo es la forma en que los autores lo exponen. Aquí es donde puede tener cabida el mencionado sermoneo. Si el autor expone el tema de forma adecuada, éste no tendrá problema en pasar "desapercibido" por el espectador/lector/lo-que-sea. Es más, yo creo que lo mejor es concentrarse en las cualidades dramáticas, en el avance del desarrollo, y no poner los temas como objetivo principal (y a veces casi único). Es decir, la historia debe ocultar el tema; éste debe recorrer la película escondido detrás del argumento, guiándolo sin dejarse ver en exceso. Creo que el espectador lo absorberá sin darse cuenta y entenderá la tesis del autor sin necesidad de chirridos e innecesarios forzamientos.

Lo que pasa es que hay autores a los que les gusta dejar bien claro su posición por encima de la obra artística que están creando. Ahí es donde entra el sermoneo, que es lo que no me gusta.

Saludos a todos,

Ferre

PD: Tanta seriedad y yo estos días repasando la trilogía de "Regreso al Futuro" :-)

Redrum dijo...

Jajajaja! Mr.Lombreeze, yo no tengo opinión!!! Si ni entendí El Espejo!

Eso sí, me pareció muy divertida... tanta solemnidad y sentimientos reprimidos, y va apareciendo Johannes para desatascar con sus hilarantes intervenciones.

De hecho, gran parte del cine ganaría mucho si Johannes apareciera en cada película.

Mister Lombreeze dijo...

Jajajaa, redrum joder, no entendiste El Espejo porque no tienes una asistenta que te lo explique, no es culpa tuya. A mí me la explicó la chica que me viene a limpiar la casa cada semana. Tuve que darle propina, claro.
Jajajaa, has tenido una de las mejores ideas para revitalizar la Industria!!!, jajaja, Johannes haciendo cameos. Bueno, bueno, bueno, ya tengo leit motiv para hacer chirigotas en el Mundo Gusano durante varios meses.
Venga, va, te gusta Ordet o no?.

@Jeremy Fox. Los luteranos y calvinistas todavía me caen peor que los católicos. Casi todos mis héroes favoritos del cine son bastante descreidos. La excepción es el padre Karras.

@Ferre (sin tilde, perdone mi analfabetismo). Regreso al Futuro tiene un claro mensaje reaccionario: el de "cualquier tiempo pasado fue mejor". Es claramente una película mccarthysta que reivindica, sin pudor alguno, los rancios valores del american dream y pretende resucitar los fantasmas del miedo al comunismo de la Guerra Fría. Moralmente es cuestionable. Filosóficamente hablando encontramos un claro ejemplo de complejo de Edipo, una madre que se enamora y quiere copular con su hijo es ciertamente un mensaje perverso.
Se percibe claramente la mano del lobby racista del KKK en una revisionista versión que nos quiere decir que fue un blanco, y no un negro quien inventó el rockanrol. En definitiva. Una de las trilogías más moralmente reprobables de todos los tiempos. Yo es que veo mensajes por todas partes.

Y bueno, por lo demás, personalmento no tengo al Arte en un concepto tan alto como para situarlo por encima del Bien y del Mal (algunas madalenas son mejores que algunas películas), así que juicio moral que va para casi todo lo que veo.
Una reducción al absurdo a propósito de lo que dice Ferre de cómo lanzar un mensaje: una bellísima y maravillosa escultura que mostrara a un pedófilo violando a un bebé en cuya base pudiéramos leer "el amor no sabe de edades" me produciría muchísimo asco por muy arrebatadora que fuera su factura.

Redrum dijo...

Jajajaja! No dude en incluir cosas como "Johannes aprueba este hilo", o "Johannes opina". Es un personaje muy Muchachada Nui, y eso tiene mucho tirón...

Sobre el mensaje, tanto me da, de hecho me parecen muchos más peligrosos muchos mensajes "subliminales" del cine actual. Piense que sus futuras hijas crecerán queriendo tener un novio pálido y depresivo.

Más allá del mensaje, atendí a la parte técnica, de la que disfruté más (cuando Johannes no se comía la pantalla). De hecho, piense que el aburrimiento que produce el film le empareja emocionalmente con los protagonistas. "¿Qué hacemos? Pues vamos a echar unos rezos..."

Tanto es así, que para muchos el final del film resulta un milagro, tanto en la parte cristiana como por el mismo hecho de acabar de una vez.

¿Cree que Boyero le pasaría una manita al comedor por un escaso sobresueldo?

1 saludo!

David dijo...

Redrum y Mr. Lombreeze. ¡Sois un par de gansos! Anda que no me he reído con lo de que la asistenta te explicó El espejo (que aún no he visto), tu visión de Regreso al futuro (me meo) y lo de la sección Johannes.. El Johannes opina de Redrum.. Ja,ja,ja.
Estaría de puta madre que lo hicieras, Mr. Lombreeze
pero venga, que este es un blog serio, ¿no?

kurtinaitis dijo...

el post este o como se diga entretenidísimo... y el debate no digamos. Agradecido me quedo

Mister Lombreeze dijo...

Mmm, pues no sé David, inauguremos la sección, pregúntemosle a Johannes:

Johannes, ¿es el Mundo Gusano un blog serio?

http://www.youtube.com/watch?v=o0hAgZg8SiY

David dijo...

Lo que tarda en cargarse ese vídeo. Es más lento que la película.. Mañana pruebo a ver si hay suerte. Pero me ha hecho gracia uno de los comentarios (ja,ja). Me temo lo peor...
Bueno, voy a dejar esto, que llevo mucho rato. Buenas noches.

David dijo...

De los comentarios de youtube, aclaro.

Sandra Mantas dijo...

Bueno, la liaste bastante. Yo he de decir que coincido con alguno de los comentarios y que separo un poco la película artísticamente de su intencionalidad religiosa. No puedo evitar que la película me seduzca en su austeridad y en su juego pictórico de luces y encuadres, aunque flipo bastante con el final y me desconcierta tanto en su estupidez que creo, que incluso lo obvio un poco, justificándolo un poco como "bueno, el tío es muy creyente" o "era otra época". No sé, tu ejercicio de crítica incisiva y de evaluar lo que ves, en este caso está bien. Yo no comparto la tesis del film, también soy ateo y el final me resulta muy ajeno, tan, tan ajeno que la soporto casi como curiosidad. No sé si me explico. Un abrazo.

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails