***Publicada originalmente el 01 de Septiembre de 2008***
17 de Mayo de 1943. El escuadrón número 617 de la Royal Air Force, (RAF), británica va a llevar a cabo la Operation Chastise, (Operación Castigo), cuyo objetivo es destruir 5 presas alemanas situadas en el río Eder, a 45 kms al este de Dortmund, región del Ruhr, Alemania, (Alemania nazi, claro). Estas obras de ingeniería civil eran importantísimas según decían los jerifaltes aliados, pues la destrucción de las presas dificultaría la continuación de la potente producción bélica industrial de la zona del Ruhr. Los nazis lo sabían, por lo que dichas infraestructuras estaban fuertemente defendidas. Numerosos enclaves antiaéreos hacían casi imposible acercarse por aire lo suficiente como para bombardear los diques como dios manda. Diques que, además, estaban protegidos también por redes antitorpedos, o sea, lo de los submarinos podía casi descartarse.
¿Cómo destruír entonces un objetivo tan vital?. La respuesta la encontró el ingeniero inglés
Barnes Wallis que desarrolló la
"Bomba rebotadora", ("bouncing bomb"), una bomba cilíndrica que, lanzada a baja altura sobre el agua, (a 18 metros de altura y 360 km/h de velocidad), rebotaba sobre su superficie, sobrepasaba las redes antitorpedos y terminaba por hundirse, -si la cosa se hacía bien y a la distancia oportuna del objetivo-, en la base de la presa donde, al explotar, producía una onda expansiva que destruiría el dique. Chupado, ¿no?. En fin, lo que es un bombardeo de precisión de toda la vida. Lo del jueguecito de las piedras rebotando sobre la superficie del estanque.
La cosa salió regular. De las 5 presas objetivo se destruyeron dos: la de Möhner y la de Eder. Ésta última incursión fue la más exitosa, si contamos los éxitos militares en número de muertos: 1.250. De los cuales, 750 fueron prisioneros ucranianos alojados en un campo cercano a la presa. Pobrecitos míos.
53 británicos murieron y la mitad de los caros aviones de la Brigada Lancaster fueron destruídos.
En cuanto a la repercusión que tuvo la destrucción de las dos presas.., pues según se mire. Barnes Wallis dijo que Alemania no se iba a recuperar en varios años de tan importantes destrozos. Lo que pasa es que Alemania se recupera siempre de todo.
Por su parte, Albert Speer, el gran Ingeniero y Arquitecto de la Alemania nazi, dijo en su libro "Dentro del 3er. Reich" que la cosa no había sido para tanto, que esas presas producían poca electricidad y que el abastecimiento de agua potable se restableció con rapidez. Aunque también reconoció que si los aliados hubieran seguido con este tipo de bombardeos, podrían haber causado mucho daño en la infraestructura industrial alemana.
Lo que parece innegable es que tuvo un gran efecto moralizador entre las tropas británicas. Y estas cosas, en tiempos de guerra, dicen que también importan. En fin, que la aventura ésta gusta mucho a los británicos.
Por eso, en 1955, el director inglés
Michael Anderson ("La vuelta al mundo en 80 días", "Las sandalias del pescador"), dirigió
"The Dam Busters", película donde
Michael Redgrave, uno de los grandes caballeros de la escena shakespeariana londinense, daba vida a Barnes Wallis, (Mr. Redgrave sabía poner muy bien cara de loco o de tío raro, su breve aparición al comienzo de
"The Innocents" o su interpretación en
"Secreto tras la puerta" de
Fritz Lang dan fe de ello).
La película no está mal y hay que destacar el mérito que supuso su realización en una fecha en la que los detalles de la "bomba rebotadora" y la "operación chastise" seguían siendo secreto de Estado. La marcha de los Dam Busters compuesta por Eric Coates para la banda sonora del film, es muy popular en las islas británicas. Hasta los de Jethro Tull hicieron un cover. Vamos a escucharla.
Pero si por algo es famosa la peli de Mr. Anderson es porque, según cuentan los cinéfilos, el ataque a las presas del río Eder que vemos en esta cinta es la inspiración más clara que tuvo George Lucas para realizar el ataque de las naves X-Wings a la celebérrima Estrella de la Muerte de "Star Wars" (1977).
Yo, que no soy tan cinéfilo (o la palabra que quería decir era "friki"?), no sabría qué deciros. Ahora resulta que Lucas casi no tiene mérito porque se fue "copiando" de nosécuántas películas anteriores para crear su saga espacial. Que si Kurosawa, que si Leni Riefenshtal, etc, etc.
Pero vaya, que no sé de cuántas maneras se puede enfocar el asunto de un bombardeo de precisión a un objetivo clave, que al final no resulta ser tan clave,- como siempre-, ya que al igual que lo de los diques no fue para tanto según el nazi Speer, la Estrella de la Muerte volvió a funcionar dos entregas después. Para mí que cuando te dicen los Generales que un objetivo es vital, te están queriendo decir que la mitad de los que vayan la van a palmar.
Bien es cierto que Gilbert Taylor filmó los efectos especiales de "The Dam Busters" y "Star Wars"... mmm..., esto da que pensar. Bueno, a mí no, porque también trabajó con Polanski, Kubrick, Hitchcock y muchos otros.
En cualquier caso, la historia de las bombas que rebotan merece unas líneas, me parece a mí. Y este vídeo que os traigo hoy ha quedado bastante bien. Se trata de un montaje de las imágenes de "The Dam Busters", -rodadas en su día utilizando auténticos bombarderos "Lancaster"-, y el audio de la escena "Star Wars" del ataque a la "Estrella de la Muerte".
¿Inspiración?, ¿plagio?. Me importa un caragio.
Se me ha quedado mal cuerpo con lo de los prisioneros ucranianos y ya no puedo pensar en otra cosa.
Disfruten del vídeo.