miércoles, 30 de diciembre de 2009
El Cine. La luz que alumbra las tinieblas.
martes, 29 de diciembre de 2009
Mr. Lombreeze meets Jeremy Fox.
Entre sus muchas e interesantes cinéfilas secciones destaca una que, con cierta periodicidad, reúne a la flor y nata de la cinefilia ciberespacial: los concursos de cine de Moonfleet.
Yo soy bastante bueno, para qué voy a pecar de falsa modestia. Pero también muy impetuoso, lo que me ha impedido ganar una de estas ediciones hasta el pasado día 15 de diciembre.
Como los concursos de Jeremy Fox son de verdad, -no como los nuestros-, tienen premio y todo. Y, no es por nada, pero me he llevado el mejor: un dvd de "El Cazador". Toma ya.
Mr. Lombreeze no es un cualquiera y Jeremy lo sabe. Por eso el contrabandista se trasladó en persona desde Barna hasta Zaragoza para hacerme entrega de tan grato y bienvenido premio. Y eso que hizo un frío de narices.
Muchas gracias a Jeremy Fox, y loor y gloria al campeón de esta edición.
Animaos a participar en las próximas, aunque os adelanto que es difícil de narices porque Jeremy es un tipo muy majo pero muy cabroncete también...
lunes, 28 de diciembre de 2009
Clásicos penosos: Los contrabandistas de Moonfleet. Fritz Lang, 1955.

Lang, conocido filonazi, (revisen su chovinista y mitológica exaltación patriótica en la chapucera "Los Nibelungos"), venía de realizar experimentos expresionistas (plagios de Pabst) en suelo europeo para el cine mudo, (la sobrevalorada y pueril "Metropolis") o semi-mudo, (la risible "M, el vampiro de Düsseldorf").
Pese a la gran amistad personal que le unía a Joseph Goebbels, la llamada del dólar USA inclinó la balanza a favor de su traslado a California, donde asimiló las claves clásicas de los géneros establecidas por los grandes estudios, dejando atrás la poca personalidad artística e intelectual que se había salvado de los nazis.


Menos mal que el estudio metió la tijera en el montaje final mejorando, en la medida de lo posible, la falta de carga dramática, de sentido del ritmo y de la acción de la película, unas virtudes de las que siempre adoleció el director vienés.
Último trabajo de Lang, -el diretor más sobrevalorado de la Historia del Cine-, para la MGM que despidió a este señor con una patada en el trasero tras profanar el honorable género de aventuras con este engendro.
Y bien que se la merecía.
domingo, 27 de diciembre de 2009
El Salitre de las botas de Pockollock. Capítulo XXVII.
Pocos días antes de llegar a la capital del Imperio, Randall W. Griffith irrumpió en la tienda de campaña del Sargento Malmus portando en su mano derecha una botella de litro y medio del excelente coñac francés "Conde de Rosignol 1812". Sorprendió a Trevor Malmus completamente desnudo a excepción de sus botas de cuero negro y el cinto reglamentario del que pendía un sable del siglo XVIII que el sargento había arrebatado las manos muertas del duque de Montferrant en la batalla de Arlingtong de 1882.
Randall quedó impresionado por el descomunal tamaño del miembro viril de Malmus quien, además, lleva los genitales completamente depilados.
"Se suda menos, lo que es especialmente aconsejable cuando viajas a caballo", -comentó Malmus-. "¿En qué puedo ayudarle Señor Griffith?".
Randall, ligeramente avergonzado, pidió permiso para tomar asiento y tras acomodarse en un butacón de campaña en la tienda de Malmus. Respondió: "¿una copa de coñac?".

Randall contó su historia personal y su deseo de venganza contra Konsultas a quien culpaba de la muerte de su amada Margueritte.
Propuso a Malmus el siguiente plan conspiratorio:

Cuando el Primer Ministro Konsultas y el tenor Vladimir Kolenko entregaran los 2.000 elefantes abisinios rojos a "la Pobo", Malmus, quien había demostrado tener un dominio sorprendente sobre el grupo de paquidermos, tendría que provocar una estampida paquiderma que terminase con la vida del Primer Ministro, de Vladimir Kolenko y de María Poboski. El escándalo sería mayúsculo. Randall W. Griffith convencería a la reina para que le nombrara a él nuevo Primer Ministro y en su nueva calidad de regente del Imperio tendría potestad para nombrar a Trevor Malmus Comandante en Jefe de las Tropas Imperiales.
- Señor Griffith, ¿se da Ud. cuenta de que lo que me está proponiendo es ni más ni menos que un golpe de Estado?, -preguntó Trevor Malmus.
- Sí. Ambos saldremos ganando y yo conseguiré mi ansiada venganza. Y lo que es más importante Malmus, estamos librando al Imperio de un cáncer: el Primer Ministro Konsultas, un extranjero, un lituano con delirios de grandeza cuyo absurdo sueño está costando a las arcas estatales mucho dinero y que ya se ha llevado por delante demasiadas vidas de manera totalmente innecesaria. Usted es un patriota, un militar que juró servir a la Patria con todas sus fuerzas. ¿Acaso no sea esto que le propongo quizás el mayor servicio que Ud. pueda brindar al Imperio?. ¿No quiere Ud. contemplar su hombre escrito con mayúsculas en el Libro de la Historia?, ¿Es que..?
El Sargento Trevor Malmus le interrumpió: "¡Quiero además el 50% de los beneficios de las minas de lignito y libertad total para elegir los uniformes de todas nuestras tropas!".
"Concedido", respondió Griffith casi sin pensar.

- Señor Griffith, -prosiguió Malmus mientras su miembro crecía y crecía-, espero que sepa lo que está haciendo y que sea consciente de que un plan, cualquier plan, tiene siempre dos finales posibles: uno bueno y uno malo.
Y se metió otro copazo de Coñac, momento que coincidió con el del máximo esplendor de su gigantesco falo.Griffith disimuló su sonrisa de satisfacción para evitar malentendidos y pensó: "Margueritte, amor mío, pronto vengaré tu muerte". Y abandonó presuroso la tienda de Malmus justo en el instante en que lleno de gozo, el sargento se lanzó de lleno a la práctica del onanismo castrense mientras cantaba una famosa marcha militar del XVII, "Amplias son las verdes laderas".
Amplias son las verdes laderas.
Pero más amplias son nuestras tropas.
Mujeres, preparad vuestras caderas.
Que pronto os quitaremos las ropas...
(Música y letra: Ferdinand G. Emerson, 1682).
Próxima Semana: Capítulo XXVIII. Muerte en la finca de Maria Poboski.
sábado, 26 de diciembre de 2009
Mundo Gusano te ayuda: "El espejo" de Tarkovski.

"Cuando terminó el montaje de "El Espejo", fue primeramente mostrado a un grupo de famosos críticos. Después de la proyección, los críticos empezaron a discutir acerca de sus significados ocultos y a dar sus interpretaciones. Así estuvieron largo rato, hasta que la señora encargada de la limpieza de la sala, cansada de esperar el fin de la discusión, les preguntó por cuánto tiempo pensaban seguir. Alguien le replicó que estaban debatiendo sobre una muy complicada película y que necesitaban tiempo para comprenderla. La señora de la limpieza preguntó: "¿Qué es lo que ustedes no comprenden de esta película? Yo también la he visto y lo he comprendido todo". Los críticos permanecieron un momento en silencio, y entonces, uno de ellos pidió a la señora que diera su interpretación de "El Espejo". Ella respondió: "Trata de un hombre que ha causado demasiado dolor a aquellos que ha amado y le han amado. Ahora, él se está muriendo y está tratando de pedirles que le perdonen pero no sabe cómo". Tras esta pausa, Tarkovski dijo que él no tenía nada más que añadir a lo que había dicho la señora."
viernes, 25 de diciembre de 2009
Felices Fiestas os desea Mr. Lombreeze.
Y ahora unas de Mr. Lombreeze:

Concerto Grosso en Sol menor "Navidad".
Arcangelo Corelli (1653 - 1713).
jueves, 24 de diciembre de 2009
Felices Fiestas os desea Monseñor Gusano.
miércoles, 23 de diciembre de 2009
Salón del Cómic de Zaragoza.
Simplemente por puro afán de informaros de lo que ahí pudimos ver. La cosa fue más o menos analizada… Y en previsión de que fuera claramente un churro, nos decidimos Mr. Lombreeze y yo mismo por desayunarnos unos pocos, como podéis comprobar en la foto.
Lo primero que averiguamos es que no madrugan ni organizadores ni visitantes. "El salón se abre a las 11hrs." nos dijeron en la puerta. Pues nada, con otra consumición en un bar de la zona, arreglado.
Por fin entramos apenas sobrepasadas las 11, dimos una pequeña vuelta para ver que es lo que se podía olisquear: Nada de nada. Lo típico en lo que se ha convertido los “salones”; stands de tiendas con absolutamente lo mismo en todas. Eso sí, en cuanto a los cómics, en lo que se refiere a muñecos y zarrios varios, pues ahí puedes encontrar alguna leve diferencia. Alguna camiseta chula, etc.
Lamentable. Ni exposiciones de ningún tipo ni nada de nada. Una guardería y un taller… En fin, nada que nos pudiera indicar que no se trataba de un acto empresarial en vez de uno cultural.
Menos mal que coincidimos con el Gran Francisco Ibáñez, padre de tantos y tantos famosos personajes, entre los que se encuentran los archifamosos Mortadelo y Filemón.
Lo presentó un tipo con pinta de friki que se dedicó con acento paleto, que no zaragozano, a leer un texto sin gana ninguna para contarnos lo que todos ya sabemos. Un acto cargado de politiqueo, (representantes del ayuntamiento), y mamoneo empresarial, (la CAI, que ha extendido sus tentáculos hacia un salón y que acabará por hacerlo suyo).
Ibáñez dio una lección, ante los peloteos y auto bombo de los “patrocinadores” que le regalaron una pluma y un libro, y nos agradeció a los lectores, únicos responsables de su éxito y de que aún siga trabajando para nosotros, el estar ahí. Dijo que en otros 50 años nos volveremos a reunir para celebrar otro cincuentenario. Se vio lo grande que es esta persona, una leyenda viva humilde, ésa es la verdad.
Nosotros por nuestra parte, decidimos ir a buscar algo de acción. Algo difícil entre los soseras de los crios y gente de los stands. Todos parados y sin vida ni alegría.
Una vez ojeado el programa, estábamos, en parte, dando gracias porque no había planeada alguna mierda típica de los Otakus o como se llamen los pirados del manga. Chorradas como karaokes, o jugar a la nintendo o cantar en japonés.., bueno, esas cosas que han conseguido corromper a las chicas y que los jovenzanos prepúberes siguen siempre, para ver si pillan algo. Única razón para que una persona se confiese que sigue algo del manga. Creo yo, porque si no, no me lo explico.
Ya pensaba que estaba todo perdido, no veríamos nada muy friki, pero, mira por donde, un grupo de apolíneos espartanos, (creo que eso querían intentar aparentar por su disfraz), se decidieron a saludar/asustar al personal con unos berridos y aullidos incomprensibles por todo el salón. Se les veía gente curtida, ya no por pasar de hacer el ridículo más espantoso, sino por sufrir las bajas temperaturas que había en ese momento. Qué gallardía, qué poses, qué nobleza...
Bueno, pues eso y que también vimos al gran ilustrador turolense Luis Royo firmando ejemplares de su obra, es lo único remarcable de esa jornada.

Un salón que sufre de lo mismo que he visto convertirse el de Barcelona. Y eso que todavía en éste, se toman el asunto en serio y algo cultural sí que hay.
En fin, no creo que aparte de decir que tenemos un salón, sea algo digno de mención ni, mucho menos, para presumir. El cómic en Aragón y en Zaragoza está, lamentablemente, muy lejos de ser de calidad. Y su salón a la altura y tan lejos como el nivel del comic de la ciudad que lo aloja.
Por cierto, mis disculpas a Jeremy Fox, creador de moonfleet, que vino a visitarnos el Sábado para entregar un premio a Mr. Lombreeze, y al que, por problemas de agenda, no pude ni saludar. Queda pendiente para una próxima ocasión.
domingo, 20 de diciembre de 2009
El Salitre de las botas de Pockollock. Capítulo XXVI.

Capítulo XXVI. Llegada de la Expedición Griffith a la Capital Imperial.
El cabo Kristian Fergusth, emisario especial de Randall W. Griffith, anunció al Primer Ministro Konsultas la inminente llegada de la exitosa expedición Griffith y sus 2.000 elefantes rojos abisinios imprescindibles para satisfacer las exigencias de "la Pobo", diva de la Ópera cuyas privilegiadas cuerdas vocales eran las únicas del mundo capaces de interpretar el papel de Prifrigia, reina de los Malakeos, de la ópera de Vinelli "Il mio poleo", ("Mi pollo").
Cuando Fergusth terminó de comunicar la buena nueva a Konsultas, puso los ojos en blanco, salivó abundantemente por la boca y cayó tendido en el suelo del despacho del atónito Konsultas. Transcurridos unos segundos Konsulas exclamó:
- Cabo Fergusth, ¿se puede saber qué demonios está ud. haciendo?
El silencio se mantuvo durante un interminable minuto interrumpido por un alarido de Fergusth que se llevó instintivamente la mano hacia el sangrante muslo que Konsultas había cortado con su famoso bastón-espadín de empuñadura de marfil de Mauritania.
- Levántese cabo. Y explíquese.
- Señor Primer Ministro. Yo.., quería pasar a la Historia como Filípides.., pero he de confesar que solamente he corrido los últimos 400 metros.
El veterano Primer Ministro recordó sus tiempos mozos en el ejército y cómo la sed de Gloria cegaba, en ocasiones, los corazones y mentes de los bravos soldados. Comprensivo con el cabo Fergusth, mandó que se le fusilara desnudo a la mañana siguiente pero sin ensañamiento.

Konsultas leyó atentamente la carta que le envió Griffith y que se conserva en la actualidad en el Museo Estatal de Comunicaciones de Arizona. Una pieza valiosísima pues es considerada hoy día como el primer mensaje escrito en lenguaje XAT, un siglo antes de la invención del teléfono móvil. Decía así:
Xzelenzia:
Xpedizión Xsitosa. Ak todos bien.
Ns vms dsps. Tkm.
Y adjuntaba una serie de indicaciones para realizar las obras necesarias en la calzada de la Capital que permitieran la circulación de los 2.000 elefantes rojos abisinios.

Dos semanas después desfilaban por el recién restaurado y rebautizado "Boulevard Paquidermo", un altivo Randall W. Griffith al frente de un ejército de orgullosos guerreros expedicionarios "lemures" cantando triunfales su himno de guerra, -"Mi madre está en el Cielo cocinando pasteles para Dios"-, y 2.000 elefantes rojos abisinios que se convirtieron en los protagonistas absolutos de la jornada.
La marcha produjo solamente un número total de muertos de 156, hecho que fue calificado por Konsultas de "excelente y asumible" y por los familiares de las víctimas de "tremendo e inesperado contratiempo".

El Primer Ministro Konsultas acompañado por el tenor Vladimir Kolenko recibió en la residencia de verano del Canciller de Hungría a Randall W. Griffith, al Teniente Virgil Blázquez y al Sargento Trevor Malmus, quien fue ascendido al grado de Coronel por sus grandes méritos en la expedición y cuya primera orden fue destinar a Blázquez a la vigilancia de un faro de la costa nicaragüense.
Una vez que el Teniente abandonó la sala a la pata coja, todos acordaron mantener en secreto la homosexualidad de Jacques Revierre Pockollock, héroe Nacional y descubridor del desfiladero que cruza el Índico.
Ufanos brindaron por el regreso de la expedición de tan complicada tarea, momento que aprovechó Kolenko para comenzar a cantar el "Gloria a los Héroes sin rostro" del maestro Scorbutto, siendo inmediatamente interrumpido por Konsultas que pronunció, en perfecto lituano, su legendario "discurso de Bienvenida de la expedición Griffith del 14 de Febrero de 1903":
"Mieli draugai. Aš turi buti trumpas. Sveikiname ir dekojame".
Lo que no sabían ni podían imaginar Konsultas ni Kolenko mientras degustaban el espumoso croata que habían descorchado para la ocasión, era que Griffith y Malmus tenían sus propios planes para los elefantes rojos abisinios...
Próxima semana: Capítulo XXVII. Los planes de Randall W. Griffith y el Coronel Trevor Malmus.
sábado, 19 de diciembre de 2009
jueves, 17 de diciembre de 2009
Oscura Venganza.
Hoy quería hablaros de los Vengadores Oscuros.
Os pondré en antecedentes. Hace mucho tiempo se crearon los Thunderbolts, unos malos malísimos que se hicieron pasar por unos superhéroes de los buenos. Y nada, hasta ahí la cosa marchaba bien. Todo el asunto es muy largo, si os interesa ya entraré en detalles en otro post. Sólo comentaros que esto se hizo bajo el liderazgo un personaje peculiar, un tal Norman Osborn, (creo que os sonara más su alias: El Duende Verde).

El actual director de Shield, Tony Stark (a.k.a. Iron Man), es despedido de su cargo. Y gracias a su colaboración más que espectacular, Norman Osborn es nombrado el superpolicía de Estados Unidos. Y como es muy listo el tío, se monta un grupito con sus antiguos aliados de los Thunderbolts y engaña a algunos de los vengadores genuinos para que le sigan en su cruzada contra el mal... Eso sí, para no alarmar al personal toman algunas personalidades que no son las suyas. Y qué bonito, en vez de Shield (escudo), se crea su nuevo instrumento gubernamental de espionaje y defensa, Hammer (martillo).
Pero pronto veremos que las ideas de Norman no son tan altruistas como parecen. Lo primero que hará, será aliarse con los peores malos del universo Marvel. Para ayudarse en las distintas facetas para conquistar el mundo poco a poco y sin que nadie se dé cuenta.
Menos mal que nuestros héroes, los Vengadores, los buenos, estarán ahí para señalarlos y avisar a todo el mundo de lo que realmente son y sus oscuras intenciones.

Algo tendrá Bendis su guionista, que ha conseguido colocar 3 colecciones de vengadores simultáneamente en el mercado.
Avisados estáis este es un buen momento para comenzar a leerlos. Seguramente el que lo haga no se arrepentirá.
Un saludo gusano.
miércoles, 16 de diciembre de 2009
El juego tarkovskiano de MrLombreeze: 10 películas que no he visto.
Top Gun
Dirty Dancing
Superdetective en Hollywood
Ghost
Flashdance
Pretty Woman
Cuando Harry encontró a Sally
Karate Kid
Footloose
Supongo que el perdérmelas en su día fue consecuencia del adoctrinamiento inconsciente que el cine y la filosofía de Andrei Tarkovski provocaron en mi cocorota durante la década ominosa de los 80, ésa que mató el cine de autor americano, (por culpa de "La Guerra de las Galaxias" según Sidney Lumet), y que engendró el abominable subgénero de "cine ochentero".
Y es que en esa época uno estaba inmerso en el universo de Kieslowski, Kaurismäki, Wenders y demás intelectualidades por el estilo.
No es que tenga mucho interés en verlas, la verdad, pero como nuestro día a día tampoco es que sea una montaña rusa de emociones, se me ha ocurrido hoy un juego para intentar condimentar mi y sus grises existencias, (lo de que nuestra existencia es gris lo dice Haneke en el blog de Crowley, no yo).

Traje de faena de MrLombreeze.
martes, 15 de diciembre de 2009
Frases de Cine. El entretenimiento.
sábado, 12 de diciembre de 2009
El Salitre de las botas de Pockollock. Capítulo XXV.
No ha sido hasta hace solamente 5 años cuando se ha desvelado la misteriosa muerte de Zelinsky el naturalista, del alcalde de Brevosia Lopinski y de las dos prostitutas que quedaron en el campamento cercano a los campos de flores de las nieves de las minas de lignito.
El hallazgo de lo que en realidad sucedió allí antes de que el Sargento Trevor Malmus encontrara los cuerpos, fue posible gracias a los intensivos trabajos de un equipo de investigadores internacionales de las Universidades de Florida, de Massachussets y de la Complutense Parapsicóloga Provincial de Bolivia. Combinando técnicas infográficas con el análisis espectrográfico de muestras de ADN de los restos de los 4 cadáveres, han llegado a la conclusión de que fue esto lo que pasó en aquel claro del bosque hace ya casi un siglo:
Cuando el alcalde Lopinski, temeroso de ser homosexual por sentir tan fuerte pasión hacia el sargento Malmus, llegó al campamento huyendo del efecto urticante de las flores de las nieves, se encontró con un extraño panorama. Zelinsky había maniatado a las dos prostitutas y tras abusar de ellas las había colocado suspendidas de sendos árboles valiéndose de un juego de poleas de su invención que años más tarde se mostraría muy efectivo en la construcción del ferrocarril transalpino. Las pobres desdichadas contemplaban a sus pies un enorme depósito lleno de un fluido viscoso cuya formulación química era la ya clásica "fórmula de Zelinsky", -CH3(CH2)14COOH-.

Las mujeres aterrorizadas comenzaron a proferir gritos de auxilio.
- ¿Qué está sucediendo aquí Zelinsky?, -preguntó el Alcalde
- Alcalde, no se preocupe, es un inocente experimento científico con el que pretendo demostrar que el "agobio", (actual "stress"), es una enfermedad que se puede curar gracias a un método de mi invención.
- Pero, pero, esas pobres mujeres, ¿qué les va a pasar?
- Alcalde, todo nuevo descubrimiento conlleva algunos riesgos, pero confío en que todo saldrá según lo previsto.
Y Zelinsky comenzó a maniobrar una serie de engranajes que acabaron por sumergir a las dos prostitutas en el fluido viscoso o "fluido de Zelinsky". A los 30 segundos de inmersión, las pobres desgraciadas comenzaron a agitarse compulsivamente. "Un poco más, un poco más...", murmuraba Zelinsky ante la horrorizada mirada del Alcalde de Brevosia.
- ¿Por Dios, pare Ud. esta insensatez!, -gritó Lopinski.
- ¡Cállese por favor!, estoy en mitad de un importante trabajo de campo.
- Zelinsky, no se lo voy a volver a repetir; ¡saque Ud. a esas señoritas ahora mismo!. ¡Es una orden!. Soy el Alcalde de Brevosia y está Ud. en mi jurisdicción.
El rostro de Zelinsky mudó de color. Rojo de ira se volvió hacia Lepinski y le escupió en la cara.
- ¡Maldito paleto bebedor de repugnante aguamiel! ¿Cómo se atreve?. Sucio pueblerino regente de vagos harapientos y malolientes. ¿Quién se cree ud. que es para detener al Progreso?. Déjeme en paz y vuelva a su pueblucho antes de que le denuncie a las autoridades imperiales y le releven de su miserable cargo. ¡No vuelva a molestarme!, o de lo contrario...

Y Zelinsky siguió contando: "46, 47, 48...". Al llegar al número "62" su percepción del claro del bosque cambió. Sorprendido descubrió que las prostitutas y todo su experimento se habían esfumado. El sol brillaba más que nunca, hasta el punto de que los árboles del bosque parecían ser translúcidos. Encontrose repentinamente desnudo y en el lugar en el que siempre había tenido sus genitales no vio sino una gruesa capa de piel rosada de aspecto impúber. De repente, una voz que sonaba dulce y melodiosa le susurró al oído:
"Percivaaaaal, Percivaaaaaaaal, te acaban de abrir la puta cabeza con un pedrusco. Estás mueeeeeeerto".
Rowentall Lopinski, Alcalde de Brevosia, acababa de asesinar, harto ya de tanto agravio a su aguamiel y a su pueblo, al presuntuoso naturalista Percival L. Zelinsky. En vano, intentó salvar la vida de las dos prostitutas que habían muerto ahogadas por culpa de los delirios de Zelinsky. Volvió corriendo aterrorizado en busca de su amor platónico, el sargento Trevor Malmus, y del guía, Malmustus el mulato. Cuando encontró los restos del cadáver del desdichado joven corrió presa del pánico sin rumbo fijo gritando: "¡¡¡La maldición de las flores de las nieves!!!. ¡¡¡La maldición de Mulubwa!!!". Repentinamente sus pies parecieron dejar de estar en contacto con el suelo y sintió cómo flotaba sobre la hierba del bosque. Una luz intensísima casi le cegaba, no sentía sus genitales y sus canas habían desaparecido. Una voz dulce y melodiosa le susurró: "Rowentaaaaaaaaall, Rowentaaaaall, desdichado, deja de correr, ¡que te has tropezado y te has desnucado!".

viernes, 11 de diciembre de 2009
Mis planos secuencia favoritos. El demonio de las armas.
¿Qué os ha parecido?.
jueves, 10 de diciembre de 2009
Robert E. Howard.
Hoy me gustaría acercaros un poco a su vida, ya que su obra es más que conocida. Famosos son sus relatos, Rostro de calavera o Los gusanos de la tierra. Entre otros muchos, claro.
Muchos habréis leído su triste biografía, así que no nos pondremos a repasarla punto por punto. Baste decir que fue un hombre que no pudo adaptarse al tiempo que le tocó vivir.
Nacido en un pueblecito de Texas en 1906, hijo del médico del pueblo, se dedicó a escribir principalmente relatos de fantasía heroica, pero también westerns, aventuras orientales y de boxeo, que era lo que se llevaba en esa época. La industria del pulp era de lo poco que daba algo de dinero a estos autores y el único ocio al alcance de mucha gente.

Endeudado y sin visos de mejora, decidió un día quitarse la vida dentro de su coche, -un Chevy de 1935-, con un Colt 380 prestado por un amiguete. Se descerrajó la cabeza de un tiro. Eligió este método tras consultar con un médico amigo suyo, el Dr. Hill, para confirmar si una persona moría de esta forma rápida y eficazmente.

Para la revista debían de crear a un ritmo frenético, encontrando el camino para lo que sería la definición de la Fantasía Norteamericana: mundos primitivos, mundos perdidos con razas olvidadas, en lugar de copiar las épicas nórdicas y textos antiguos greco-romanos como hacían los conservadores europeos.

En la parte mala, no ocultaremos que fue tachado de racista, (en esos años y en Texas...), sin embargo, era una persona altamente sensible con la naturaleza y con los animales.
Los gusanos te damos las gracias Robert E. Howard. Gracias por Conan, por Kull, por Solomon Kane, por Bran Mak Morn, por Cormac Mac Art. Y por otros muchos.

domingo, 6 de diciembre de 2009
Semana No Santa Gusana. Último capítulo. Religulous. El absurdo anacronismo de las religiones organizadas.
sábado, 5 de diciembre de 2009
El Salitre de las botas de Pockollock. Capítulo XXIV.
Randall W. Griffith gritó: "¡Blázquez!, ¿puede ud. decirme qué narices esta ocurriendo?, ¿cómo osa irrumpir así en mi despacho?, ¿qué le pasa hombre?, ¡está ud. pálido como un cadáver!".
Pero el Teniente Virgil Blázquez no pudo responder nada. De inmediato apareció tras él el Sargento Trevor Malmus. Mostraba un aspecto lamentable, pero una sonrisa de satisfacción adornaba su rostro y los ojos le brillaban como el fuego del infierno. Su uniforme aparecía medio destrozado y varias heridas leves de arcabuz ensangrentaban sus ropas. Llevaba en su mano derecha la azada "Marietta" completamente cubierta de sangre seca.
- Dios mío Malmus, ¿qué ha pasado?.
Trevor Malmus le contó a R. W. Griffith su versión de lo ocurrido. "Soy el único superviviente sire", añadió.
Malmus narró también cómo tras cruzar los prados de las flores de las nieves había llegado a la aldea de las minas de lignito donde fue recibido a arcabuzazos por los lugareños. Azada en mano machacó las 27 cabezas de aquellos desgraciados, encadenó a los 2.000 elefantes rojos abisinios y se los llevó a Brevosia.
- Ya tiene Ud. sus elefantes sire.
- Pero, pero.., ¿Y Zelinsky, las prostitutas y el alcalde Lopinski?.
- Muertos sire
- ¿Cómo?, ¿muertos?, ¿por qué?
- No lo sé sire. Cuando llegué al campamento con los 2.000 elefantes encontré allí sus cuerpos que enterré con mis propias manos bajo un sauce llorón armenio.
Griffith tuvo que sentarse. No entendía por qué Malmus había usado la azada para asesinar a los 27 lugareños para enterrar luego los cuerpos de Zelinsky, Lopinski y las prostitutas con sus propias manos.

Azada "Marietta". Museo antropológico de Kinshasa.
Tras unos minutos de confusión pidió que le dejaran solo. Allí, en el despacho del Ayuntamiento de Brevosia, intentó mantener la cabeza fría para evaluar el resultado de su misión. A fin de cuentas había sido un éxito. Tenía los 2.000 elefantes que iba a usar para vengar la muerte de su amada Margueritte. Las bajas habían sido mínimas. Se había hecho un descubrimiento científico importantísimo y todo parecía ir bien. Lamentó la muerte de su amigo de la infancia, Zelinsky, aunque comenzaba a estar harto de su teoría de inmersión en fluido viscoso. También se compadeció del pobre Malmustus quien no pudo disfrutar de su ansiada venganza.
Pensativo, Randall W. Griffith miró por la ventana y vio cómo era el propio Malmus el que conducía a los 2.000 elefantes rojos abisinios al recinto de confinamiento que los 2.400 soldados expedicionarios "lemures" habían estado construyendo en el centro de Brevosia para lo que habían tenido que demoler un monasterio agustino del siglo XII con un campanario de 17 metros de altura que era el orgullo de la población local y que había fundado el mismo San Agapito, patrón de los hugonotes. Ocupaban el solar ahora los elefantes que Konsultas y Kolenko le habían encargado llevar hasta la capital del Imperio. La construcción de la empalizada había talado el 95% de los recursos forestales de la zona, condenándola, muy probablemente, a una hambruna de al menos 10 años.

Griffith mandó a Blázquez que ordenara a sus tropas no responder a las provocaciones de ese "hatajo de paletos bebedores de repugnante aguamiel".
Trevor Malmus, que cabalgaba al lado de Blázquez al que el prototipo de bombona de butano alcanzó de llenó arrancándole una de sus dos piernas de madera de boj, le dijo a pocos kilómetros del pueblo:
- Virgil, sigues siendo tan tonto como cuando te conocí luchando contra los rebeldes bogoteños. Ese Griffith es un cretino y un niñato.

viernes, 4 de diciembre de 2009
Semana No Santa Gusana. Capítulo V. ¿Hay alguien ahí?. Sinfonía "Kaddish".
El norteamericano Leonard Bernstein, desdenciente de judíos ucranianos, es, por varios motivos que ya expondré en otra ocasión, uno de mis seres humanos favoritos ever. Me encantan su biografía, su labor como compositor, como divulgador y como director de orquestas, especialmente de la célebre Filarmónica de NY.
Casi 20 años después de la composición de su Sinfonía n.3 "Kaddish" de 1963, Leonard Bernstein rompió a llorar en mitad de una interpretación de la obra que el propio compositor estaba dirigiendo. Una profunda emoción le embargó. Más tarde confesó que había creído ver las imágenes de su difunta esposa Felicia, y de los hermanos Robert y John Kennedy, presidente a cuya memoria está dedicado este trabajo del Maestro Bernstein. De hecho, la sinfonía fue compuesta solamente unas pocas semanas después del magnicidio del líder político más carismático que han conocido los USA: JFK.
El kaddish es una oración de difuntos de la liturgia judía. Una oración, como todas, de one way. Una oración que nunca tiene respuesta, lanzada al Universo vacío y muerto al que le hemos puesto una túnica y unas largas barbas para que parezca menos vacío y menos muerto.
En el segundo movimiento, Din-Torah, Bernstein, autor también del texto, se cabrea con Dios y le acusa de incumplir su promesa de cuidar de la Humanidad. Furioso, el narrador le ajusta las cuentas y le reprocha su abandono:
"¿Me estás escuchando, Padre? Tú sabes quién soy: Soy tu imagen, ese obstinado reflejo tuyo que el Hombre ha destrozado, extinguido, desterrado. Y que ahora corre libre para jugar con su recién descubierto fuego, ávido de muerte, muerte voluptuosa, completa y definitiva.
Señor, Dios de los Ejércitos, Te desafío a que respondas. !Tú que consientes que ocurran estas cosas, el Señor de los Ejércitos!. Tú con Tu maná, Tu columna de fuego!. Tú nos pides fe, ¿dónde está la tuya?. ¿Por qué te has llevado Tu arco iris, ese bello lazo atado alrededor de Tu dedo para recordarte no olvidar Tu promesa?
"Porque he aquí que he puesto mi arco en las nubes ... Y voy a mirarlo, para que pueda recordar mi pacto eterno ... "
Tu pacto! Tu trato con el Hombre! Dios de hojalata! Tu trato es de hojalata! Se arruga en mi mano!. ¿Y dónde está ahora la fe, la Tuya o la mía?...".
Tremendo.
Más adelante, en otro pasaje de esta sinfonía, Bernstein consuela a Dios y se esfuerza en animar al pobre Anciano, para intentar recuperar y revitalizar ese pacto. Pero eso ya lo contaremos en otra ocasión.
A continuación, y solamente para melómanos valientes, el angustiado Din Torah de la Sinfonía n.3 "Kaddish" para orquesta, coro mixto, coro infantil, soprano y narrador, del maestro Leonard Bernstein.
La versión es la de la Orquesta Filarmónica de la Radio de Francia dirigida por Yutaka Sado. La voz del narrador es, ni más ni menos, que la de Yehudi Menuhin.
jueves, 3 de diciembre de 2009
Semana No Santa Gusana. Capítulo IV. Los dioses de los dioses.
Y claro, mirando, mirando, y siendo lector de cómics, me pregunto si nuestros héroes favoritos, "nuestros dioses modernos", tienen inquietudes religiosas.

Pues oigan, parece que sí. Y tanto, jajajaja. Pero cuidadito con esta información, no sea que os deis cuenta de que sois incompatibles religiosamente con vuestro personaje favorito.
Lo que me lleva a preguntarme, ¿Te puede enojar tu superhéroe favorito por su opción religiosa y eso te lleve a tenerle menos respeto?. ¿Pensareis que estáis apoyando a un hereje?. ¿Eres un taliban?. ¿No tienes talante?.
Bueno, para los valientes que quieran echar un vistazo y salir de dudas, mirar aquí.

Pues aparte de esto, Monseñor os va a dar otra solución. Ya que una figurita de vuestro personaje favorito vale un pastón, ¿cómo podéis venerale como se merece?. Toda religión necesita una representación de su ídolo. Pues venga, aquí tenéis una paginita donde la solución es barata, barata. Aquí mismo.
No me deis las gracias. Ahora a idolatrar/adorar a vuestros dioses.
Un saludo gusano.
miércoles, 2 de diciembre de 2009
Semana No Santa Gusana. Capítulo III. Opiniones de un payaso. Los creyentes desilusionados.

"Sí, la Iglesia es rica, tan rica que apesta. En realidad apesta a dinero, como el cadáver de un hombre rico. Los cadáveres de los pobres huelen bien, ¿lo sabía usted?."
Heinrich Böll , (1917-1985), ganador del premio nóbel de Literatura en 1972, publicó en 1963 su novela "Opiniones de un payaso" que, dicho sea de paso, es una de mis novelas favoritas ever. Esto es, más o menos, lo que nos cuenta:
Hans Schnier es un payaso perteneciente a una rica familia protestante alemana. Pese a la inicial oposición de sus padres, sus innatas y evidentes dotes artísticas le permiten labrarse una respetable carrera en el mundo del espectáculo. Hans está enamorado de Marie, practicante - militante católica con quien convive en concubinato, (o "concupiscencia carnal" como él dice). Tras 6 años de vida en común, Marie finalmente abandona a Hans debido, según él, a la presión de su círculo de amistades, activistas católicos, que le reprochan no estar casada por la Iglesia, como Dios manda. Es entonces cuando Hans, abatido, comete el peor pecado posible que puede cometer un payaso: "provocar compasión" durante una de sus actuaciones.
Comienza así el declive personal y profesional del joven protagonista que, de vuelta a su domicilio en Bonn, tras un decepcionante último bolo, comienza a telefonear a diversos personajes en busca de Marie, su amor. Un recurso que sirve al escritor para darles un repaso a muchos de sus compatriotas.
Para más INRI, su relación con sus progenitores no es muy buena. En una ocasión en la que Hans telefonea a su madre, como buen payaso que es, le dice: "Le habla un delegado del comité central de los judíos yanquis que se encuentra de viaje; pónganme con su hija por favor." La hija de su madre, su querida hermana Henriette, está muerta. Lleva 15 años muerta. Murió poco antes de terminar la Segunda Guerra Mundial cuando partía, muy contenta y con la bendición parental, a ayudar en la lucha de la Gran Alemania contra judios y comunistas. Hans quedará para siempre marcado por esta desgracia de la que culpa a sus padres. Otro buen ardid argumental con el que el autor ajusta cuentas con la sociedad alemana de los 40, tan pronazi y probelicista.
Dicen que "Opiniones de un payaso" es un lúcido análisis y una brillante disección del comportamiento de parte de sociedad alemana de posguerra, a la que el propio autor pertenece y a la que crítica su hipocresía. Una hipocresía que no deja a Hans conseguir su única ambición: ser feliz trabajando de payaso y amando a Marie.
Por eso parece ser que fue de las obras que enarbolaron los jovenzanos del 68. Y eso que Böll era un católico de los pies a la cabeza. Heinrich Böll se lamenta, decepcionado, de la falta de auténticas convicciones morales de los católicos alemanes. Ésta es la parte que más me hace disfrutar, como buen antijuedocatolicoislamicorreligionario que soy. Pero ojo, que el protagonista, Hans Schnier es agnóstico y reparte cera a todo el mundo. A mí también. Célebre es su sentencia: "Me aburren los ateos. Siempre están hablando de Dios". Tiene más razón que un Santo.
La ironía y el sarcasmo que destilan cada una de las frases del payaso Hans Schnier son deliciosamente divertidas, aunque no están exentas de amargura por el dolor de la pérdida de Marie, motor vital del protagonista y del libro.
Esto es lo que más me sigue atrayendo de esta novela. Yo me quedo con la crítica religiosa y el estilo narrativo de Böll y dejo para el que le interese la crítica social del "milagro alemán" del católico Adenauer.
Cómo disfruto con párrafos como éste:
"Me hubiese gustado mucho llamar enseguida a Sommerwild, pero era aún demasiado pronto, ya que me había propuesto despertarle de su sueño allá por las dos y media de la madrugada, y conversar con él largo y tendido sobre arte. (...). También reflexioné cómo le asesinaría. A los estetas lo mejor es romperles en la cabeza un valioso objeto de arte, con lo cual sufren, aún al morir, por el crimen artístico. Una madona no sería lo bastante valiosa y es demasiado sólida, y moriría con el consuelo de que la madona se había salvado; y una pintura no es lo bastante pesada, si se exceptúa el marco, y le quedaría también el consuelo de que el cuadro se conservaba. Podría yo raspar la pintura de un cuadro valioso y estrangularle o asfixiarle a él con la tela: ningún crimen perfecto, pero un perfecto crimen estético. "

Un excelente libro que cuenta con un ilustre predecesor, (¿inspiración?), "El Guardián entre el Centeno" y que fue llevado al cine , aunque no sé nada acerca del resultado.
martes, 1 de diciembre de 2009
Semana No Santa Gusana. Capítulo II. Los libros "sagrados".
Porque, en medio de esas delicias, el Profeta mantenía un establo de concubinas, incluyendo a Reihana, su cautiva ‘judía’. Sus esposas y amantes estaban obligadas, por la ley musulmana, a satisfacer sus necesidades sexuales en cualquier momento del día o de la noche, y el Profeta se reservaba el derecho de disfrutarlas “desde la cima de sus cabezas hasta la planta de sus pies”.
Esto parecería no ser terrible para los estudiantes del Informe Kinsley, con excepción del caso de Aisha, la esposa favorita de Mahoma. Aisha era la hija de Abu Bakr, el mejor amigo del Profeta y su más fiel seguidor. Ni bien Mahoma posó sus ojos en Aisha, comenzó a fantasear con tener sexo con ella. Había un problema con esta fantasía. Aisha, en ese entonces, era un pequeña niña de cuatro o cinco años, mientras Mahoma era un hombre de mediana edad de cincuenta.
La pedofilia no fue practicada sólo por Mahoma, sino también sancionada por el Corán. En el debate sobre el período de espera requerido para determinar si una esposa está encinta antes del divorcio, el texto sagrado dice, “Si estás en duda en lo concerniente a aquellas de tus esposas que han cesado de menstruar, sabe que su período de espera debe ser de tres meses. El mismo período se aplica para aquellas que aún no han menstruado” (65:4).
Aquellos que piensan que los musulmanes modernos han abandonado estas enseñanzas, deberían estudiar las fotos y videos que acompañan este artículo y recordar las palabras del Ayatollah Khomeini, el clérigo islámico más famoso del siglo XX:
Un hombre puede tener placer sexual de una niña tan joven como un bebé. Sin embargo, no debe penetrarla; sodomizar a una niña está bien. Si un hombre penetra y daña a una niña, entonces debe ser responsable por su subsistencia toda su vida. Esta niña, sin embargo, no cuenta como una de sus cuatro esposas permanentes. El hombre no tendrá derecho a casarse con la hermana de la niña… Es mejor para una niña casarse en una época en que comenzará a menstruar en la casa de su esposo, mejor que en la casa de su padre. Un padre que case a su hija tan joven, tendrá un lugar permanente en el cielo.”--
Muy fuerte, ¿verdad?.

Pero Allah es misericordioso especifica que no se debe golpear en la cara para no desfigurarla:
“Un hombre preguntó al profeta : “¿Cuáles son los derechos de la mujer respecto a su marido? “
El Enviado respondió: – El marido ha de alimentar a su mujer y la ha de vestir. No la ha de pegar en la cara ni desfigurarla; pero puede rechazar a su mujer dejando de acostarse con ella” (Ibn Maja, Sunan, Kitab al-Nikah.”
Así es como Allah dispuso en su sabiduría, la forma de reprimir a las mujeres; aunque no se especifica los daños psicologicos y morales; queda implicito para cualquier musulman obediente y piadoso que al golpear a su mujer tal como lo ordena el profeta debera hacerlo en silencio; sin gritarla; llamarla bruta, perra, encerrarla durante semanas a pan y agua, no dejarla ver a sus hijos por años, etc, etc, etc, etc, etc,, etc, etc…………………………., etc.
“¡Hay que pegar a las mujeres, sí, pero hay maneras y maneras de hacerlo: a la que es delgada, con un bastón; a la robusta, con el puño; a la gordita, y sólo a ella, con la mano bien abierta…, de modo que uno no se haga daño a sí mismo ! (Claude Aner, citado por H..Bousquet: L ‘ éthique sexuelle de l ‘ islam, p. 171). ”
lunes, 30 de noviembre de 2009
Semana No Santa Gusana. Capítulo I: Fotografiando hadas (1997). Ver para creer.
Pero, ¿se puede desandar el camino?, ¿cómo se puede volver a creer?: pues con una señal tan clara como la de una víctima inocente moribunda pero de signo contrario. Yo que sé.., que me toque alguna lotería sería un buen comienzo en mi caso.
Ciencia contra Religión. El Bien contra el Mal, una vez más. El mundo está lleno de santotomases por todas partes empeñados en tocar las heridas del Cristo o si no, no suben al Cielo porque no existe. ¿Puede la Ciencia traernos el más allá un poco más pacá?. ¿Eres de los que ven Señales?. De todo esto y algo más, trata la película "Fotografiando hadas", la ópera prima de Nick Willing, realizador televisivo más que de pantalla grande, que me volvió a agradar recientemente con "El rey del río" (2005).
"Fotografiando hadas" nos cuenta la historia del reputado fotógrafo Nick Castle quien, tras una experiencia personal traumática, siente que Dios le ha abandonado y comienza a dedicarse a desenmascarar a los farsantes nuevos profetas de la Ciencia al servicio de lo paranormal, o sea, a toda esa panda de animistas y sociedades espiristas que tanto auge tuvieron en la Inglaterra de comienzos del XX, donde se sitúa la acción de la película.
Mr. Castle, experto en técnicas fotográficas, desvela los trucos de los tramposos que intentan camelar al respetable con supuestas fotografías de seres que no podemos ver pero que conviven con nosotros. Otro truco de feria para ganar adeptos en unos tiempos, ya entonces, en los que la Razón y la Ciencia creaban, a todo ritmo, más y más ateos y descreídos.
Nick, (Toby Stephens), representa al científico incrédulo que necesita pruebas para creer antes de que le llegue la hora de irse al otro barrio, -como nos pasa a todos los ateos, que somos los que más esperamos un milagro con diferencia-, y el Reverendo Templeton, (Ben Kingsley), encarna a la Religión, o lo que es lo mismo, todos ésos que solamente necesitan su fe para creer, y las pruebas, ni las necesitan, ni las quieren.
La historia del film está ligeramente basada en la novela homónima de Steven Szylagi, y Nick Willing lo dirige con gracia al estilo del cine británico, ese cine que no es ni europeo ni americano, y que tan buenos resultados da en muchas ocasiones porque aúna lo mejor de los dos mundos. No es una obra maestra pero se deja ver con cariño, se pasa un buen rato y ofrece momentos hermosos y románticos. Además, termina con la Séptima Sinfonía de Beethoven.
Hay que destacar la interesante y hermosa banda sonora de Simon Boswell, que incluye un bonito vals que se convierte en el leitmotiv del film.