El único trauma que me quedó por no hacer la mili, tras terminar mi prestación social sustitutoria, fue (además de descubrir que un sindicato funcionaba tan mal como el resto del Universo conocido) que no pude lucir un uniforme como dios manda. Así que mi madre tiene que llevar en su monedero fotos mías vestido de civil que, la verdad, tampoco es que luzcan demasiado bien. ¿Qué les costaba a los señores y señoras del Ministerio de Defensa haber diseñado para los objetores de conciencia un uniforme molón para cobardes como yo?. Con lo que me ha gustado a mí eso de disfrazarme de representante de la Ley y el Orden: Policía o Sheriff, pero yo siempre del lado correcto cuando jugábamos a pegarnos tiros los unos a los otros. Personalmente hubiera cedido las 45.000 pesetas que me dieron para "mis gastos" (con los que me compré unas botas Sendra) y el sueldo mensual (no recuerdo qué cantidad era) a cambio de pasear por Zaragoza uniformado aunque fuera con algo discreto como esto:

En fin, lo he superado. O no, no sé. El caso es que me ponen muchísimo los uniformes.
Escribir entradas sesudas con el brazo derecho escayolado es una lata y una pérdida de tiempo (y de energía) todavía superior a hacerlo con el miembro útil (sigo hablando del brazo). Así que me encuentro hoy aquí, aburrido en mi angustia existencialista, redactando una entradita light y de fácil digestión, como la ensaladilla rusa.
Hoy, con todos ustedes, Mis 10 Uniformes militares fetiche (sí, en serio, la entrada de hoy va de eso). Agárrense los machos que viene el listado (el orden no significa nada y el post tampoco):
1.- Infantería colonial británica de finales del XIX. El de la guerra anglo-zulú, vaya. Un clasicazo. Elegancia británica; la casaca roja del Imperio es uno de mis grandes leit motivs en esto de mi fetichismo militar. Me imagino al diseñador del uniforme respondiendo a la pregunta de los jerifaltes británicos: "- Yo creo, mis queridos señores jerifaltes, que el mejor color para combatir en Sudáfrica es el rojo, pero un rojo bien vivo, que se vea de lejos con claridad. -¿Y el casco?. - Pues blanco, hombre, bien blanco.., y que se jodan los zulús".
2.- La Real Policía Montada del Canadá (los "mounties"). Ladies and gentlemen, lo reconozco: éste es mi favorito. Otro clasicazo de rojo británico. Con ese gorro de campaña, esas botas de cuero marrones, esos guantes de manga larga, esa banda amarilla en los laterales del pantalón... ¡Maravilloso!. I´m loving it.
También me pone mucho sus "versiones" yankis; especialmente el uniforme de la policía del Estado de Rhode Island. Cualquiera le replica una multa a un tío con estas pintas. Pero, eso sí, qué botas más chulas.
3.- Grupo de Fuerzas Regulares de la Infantería española. Son, de lejos, los más elegantes de nuestro desfile patrio del Día de las Fuerzas Armadas. Mi padre y miquel zueras hicieron una mili norteafricana (aunque mi padre calzando alpargatas) que se les debió hacer más larga que un día sin pan. Gorro moruno (tarbuch), capa blanca, uniforme color garbanzo con la camisa de manga corta (desabrochada dejando toda la pechera al aire) y guantes blancos de gala. Joder, acojonante.
4.- Policía de NY / San Francisco. Los hemos visto en 125.000 películas hollywoodienses y a mí me siguen fascinando. Van de negro de arriba a abajo. Elegancia urbanita y minimalista. Estupendo. Si vas a NY o a Frisco y no te haces una foto con ellos te pierde algo grande. Aunque últimamente ya no se dejan. La de la foto, Heather Fong, fue jefa de la policía de San Francisco hasta hace un par de años. Estas cosas solamente pasan en los USA.
5.- Húsares napoleónicos. Sabido es que el listo de Napoleón disfrazaba a cualquier mindundi con un uniforme despampanante para que el iluso de turno se creyera el amo del mundo y se dejara lancear, cañonear o ser cosido a navajazos en los lodazales y las callejuelas más infect@s de Europa. Ese gusto por los excesos llevó al dictador gabacho a conquistar medio continente, o sea, que la cosa parece que funcionaba (Hitler tomó buena nota). De entre el extensísimo catálogo de uniformes napoleónicos (donde hasta el aguador parecía un general) me quedo, lamentándolo mucho por los coraceros, con el clasico húsar de interminable y plumífero sombrero.

6.- Oficial Allgemeine-SS (brazo político de las SS). Pffff, me resistía a incluír el uniforme de estos hijos de la gran puta en mi lista, pero me estaría engañando a mí mismo si no lo hiciera. Diseñados por un nazi cuyo nombre no recuerdo y fabricados por Hugo Boss (sí, el de las boutiques molonas), los uniformes de las SS arrinconaron a las (y a los) camisas pardas de las SA para reivindicar la elegancia del negro - luto - muerte. La gorrita de plato desprende connotaciones terroríficas y fetichistas a partes iguales por culpa del nazisploitation de las narices. Una vez sostuve una de las repugnantes dagas SS (supuestamente era original) en mis manos y la verdad es que reconozco que pasaba algo parecido a lo del chiste del tricornio de la Guardia Civil. No voy subir la foto de ningún nazi a este blog si no es para ponerlo a parir. Y como no es el caso, pues...
7.- Zapador de la Legión Extranjera francesa. No es que la labor de un zapador en tiempos de guerra pueda considerarse como la más idónea para ser cantada y recordada por los bardos, al menos no al mismo nivel que la de otros guerreros de infantería o caballería, pero estos chavales, que llevan el característico quepis blanco, portan un hacha, lucen barba de varias semanas, se rapan la testa, se adornan con un delantal de cuero y calzan botas que parecen compradas en la tienda de Dr Martens de London, me recuerdan mucho a mí cuando ayudaba a mi padre en la pescadería. Imposible que te arresten por ir mal afeitado.
8.- 7º Regimiento de Caballería de los Estados Unidos de América (los "Garryowen") de las Guerras Indias. Tan favorito como el de la Policía Montada del Canadá. Demasiado mítico como para dejarme llevar por el esnobismo y obviarlo en esta selección. Sin otro comentario más que... ¡sublime!.
9.- Comisario político del NKVD (1937-1942). Ellos fueron los grandes especialistas de la modalidad de ejecución "tiro en la nuca". Con este uniforme me sucede lo mismo que con el de las SS: solamente con verlo y recrear en mi mente algunas de las atrocidades cometidas por algunos de estos hijosdelagranputa, me cago en los pantalones. Sin embargo, he consumido demasiada literatura hazañas bélicosoviéticas de la WWII como para ignorarlo. Vistiendo este uniforme se combatió contra el invasor nazi con la misma intensidad con la que se oprimió y masacró a los propios camaradas. En fin, prefiero recrearlos en mi cabeza alentando a los soldados del Ejército Rojo a resistir en Stalingrado que imaginármelos reunidos, solamente un año antes, con miembros de la Gestapo para diseñar la estrategia de la "pacificación" de Polonia (o sea, el reparto).
10.- La boutade de toda lista que se precie: Infantería ligera del Regimiento de Voluntarios de Aragón de 1762. Lucharon, al final la Guerra de los Siete Años (¿se acuerdan de Barry Lyndon?), a las órdenes de Carlos III contra los portugueses, que estaban aliados, como siempre, con los perros ingleses. ¡¡¡Un soldado en alpargatas!!!. Venga hombre, esto es insuperable. Orgullo de patria chica que incluyo en este listado (a mucha honra).
*Premio Especial al Mejor Tocado Guerrero. Ex aqueo para
- El
"slouch hat" que lucían
Mel Gibson y Mark Lee en
Gallipoli.
- El alucinante
Czapka polaco.
- El súper alucinante
gorro de los Húsares "de la calavera" prusianos.
* Premio Especial Imposible ser más nenaza. Para todo aquél o aquella que siga pensando en lo guapo que estaba Richard Gere, todo vestidito de blanco, en Oficial y Caballero. Jo, qué moñada de uniforme. Yo comulgué vestido así, más o menos.
* Premio Especial Imposible ser más ridículo. Ex aequo para
- La guardia griega presidencial.
- La esperpéntica guardia suiza vaticana cuyo uniforme diseñó (yo creo que a mala hostia) el maestro
Miguel Angel.
* Premio Especial Imposible ser más bizarro. Atención.., los
húsares de la caballería polaca... ¡¡¡Llevaban
armaduras con alas!!!.
Supera eso
George Lucas.